Las joyas de oro son un tesoro dentro de cualquier joyero, piezas eternas que acompañan en ocasiones especiales o en el día a día, otorgando un toque elegante y sofisticado. Es precisamente este uso continuado, unido a determinados factores externos, lo que hace que las joyas puedan ensuciarse y parecer más apagadas. Por eso, es necesario aplicarles unos cuidados específicos y aprender cómo limpiar el oro para que siempre luzcan perfectas.
Siguiendo una pautas básicas de limpieza del oro es muy fácil mantenerlas tan brillantes como recién estrenadas. ¡Devuélveles el aspecto del primer día y presume de joyas!
Aunque existen una amplia variedad de trucos caseros para saber cómo limpiar el oro, lo más recomendable es aplicar una limpieza básica con la que se sepa, con garantía, que la pieza no va a sufrir daños. Esto servirá de mantenimiento rutinario de la joya, con lo que se conseguirá que permanezca intacta y brillante durante más tiempo.
Para una limpieza básica no es necesario contar con muchos productos. Solo se necesitará agua, un jabón de ph neutro, un cepillo de cerdas suaves y una gamuza de algodón. Estos son los pasos a seguir:
Debe tenerse en cuenta que las piedras y demás incrustaciones corren el riesgo de desengancharse y que los enganches también podrían romperse de aplicar demasiada brusquedad en la limpieza. Lo más recomendable sería probar primera en una pequeña zona de la pieza para comprobar el resultado.
Este tipo de limpieza acabará efectivamente con la suciedad y las impurezas acumuladas por el uso diario, pero si las necesidades de la joya son mayores, se recomienda acudir a un profesional joyero para que la limpie de forma adecuada. Además, este especialista podrá pulir las piezas que estén rayadas y conseguir que recupere el lustre del primer día.
Algo que se debe tener en cuenta antes de proceder a limpiar las joyas de oro es el tipo de oro del que están hechas, ya que tienen diferentes características y, por lo tanto, los cuidados a aplicar son distintos.
Aunque saber cómo limpiar joyas de oro es fundamental para que no pierdan su lustre con el paso de los años, también existen una serie de acciones que pueden llevarse a cabo para mantener su brillo intacto.
En primer lugar, la forma de conservar estas joyas es importante. Lo ideal sería mantenerlas dentro de sus cajas o bien dentro de bolsitas de tela que las separen de otras joyas y, de esta forma, evitar arañazos o rasguños.
Es importante no rozar directamente las joyas de oro con productos de limpieza ni de cosmética, como perfumes o cremas, debido a sus componentes químicos. El sudor de la piel también puede hacer que el oro vea su brillo afectado, por lo que es preferible quitarse las joyas cuando se haga deporte u otro tipo de actividad física.
Por otro lado, debe evitarse llevar las joyas de oro puestas cuando se vaya a la piscina o la playa, para que el cloro y la arena no puedan afectarlas. ¡Y mejor no dejarlas expuestas al sol!
Con estas pautas sobre cómo limpiar joyas de oro, tus joyas siempre lucirán brillantes. No te olvides de consultar nuestro artículo de cómo limpiar la plata si quieres aprender también a cuidar tus joyas de este material. ¡Presume siempre de joyas perfectas!